Aunque parezca sencillo, amueblar y decorar una habitación destinada para niños no es nada sencillo. La habitación debe convertirse en un espacio multiusos, ya que los más pequeños jugarán, estudiarán y descansarán en ella. Contar con el mobiliario perfecto para que puedan realizar todas estas actividades se convierte en esencial.
Los niños están en movimiento constantemente, aprendiendo, jugando y experimentando, pero también necesitan un espacio en el que relajarse y descansar. Si bien de pequeños necesitan la cercanía de sus padres, a medida que crecen necesitan un espacio propio para ellos.
Para que su cuarto se convierta en el lugar preferido de la casa necesitamos crear un ambiente relajante, cómodo y agradable. Las necesidades de los pequeños cambiarán en función de la edad.
Cuando son bebés necesitan no pasar ni frío ni calor y que su posición al dormir sea correcta. Por eso tenemos que asegurarnos que las sábanas y los cojines sean los adecuados para su edad. También es adecuado que tengan unos 70 centímetros de espacio frente a la cuna. Así podremos limpiar la habitación sin problemas, evitándoles sensación de agobio.
Hasta que cumplan cuatro meses, se debe situar la base de la cuna a un nivel elevado y con una sabana sin cojines. Durante estos meses los bebés no se mueven demasiado y así evitaremos que tengan exceso de calor.
Desde los cuatro meses hasta el año de edad los bebés empiezan a moverse más en la cuna. Para que duerman más seguros bajaremos la base de la cuna ya que así evitaremos que puedan caerse mientras sueñan. Los taparemos con sábanas y prescindiremos de las almohadas, ya que podrían dificultar su respiración.
Después de cumplir un año van a querer explorar el mundo por su cuenta, por lo que podemos quitar las barandillas del lado exterior de la cuna. Ya podremos añadirles almohadas, mantas, edredones y sus también sus peluches preferidos.
Una vez vayan creciendo, si queremos que puedan tener sus propios invitados, siempre podemos instalar una litera o cama nido. Podemos usar una estantería para que la usen como mesita de noche, aprovechando así el espacio.
La iluminación también tiene mucho peso. Lo recomendable sería instalar tres lámparas. La de techo, para iluminar la totalidad de la habitación, la de trabajo, para sus estudios, y la de noche, para evitar los miedos nocturnos. También tendremos que dotarles de cortinas ya que servirán tanto como para protegerles de la luz solar a la hora de la siesta como para darles la privacidad necesaria en su propio espacio.
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