La primera silla que se conoce remonta al s.XIV a.C. (Edad Antigua) concretamente al periodo comprendido entre 1336 y 1325 a.C.:

Fabricado con madera y oro y repleto de jeroglíficos y símbolos de la mitología egipcia, entre los que destaca la iconografía del Dios Heh, de hecho, se trata de una de las representaciones más perfectas que de éste se conocen. Heh, Dios del espacio infinito y de la eternidad, está tallado en el respaldo del sillón y aparece representado como un hombre arrodillado sobre el símbolo del oro, con una cruz en su brazo y sujetando en sus manos dos hojas de palmera que simbolizan los millones de años de vida deseables para los egipcios.